Vive tu instante viajera

El mundo se detuvo un instante cuando resonó detrás del teléfono, desde ciudades viejas, desde otras historias, tu voz con horas cambiadas, tu voz que me nombra.
Se congeló la sangra en las venas, el corazón perdió su ritmo de tambor y a punto de reventar el pecho se repite la asfixia, el ahogo que me ataca, apenas apareces en mi camino.
Se atropellan las palabras de tal manera entre los dientes, se enreda la lengua y el pensamiento de tal forma, que por instantes pierdo el sentido y solo atino a decir nos vemos.
Luego el silencio sin calma.
Cada paso que doy te busca a sabiendas de no encontrarte, la ciudad entera pronuncia tu nombre y no puedo dejar de pensarte, pero no te ocupes de mí, recuerda la consigna que acordamos: vive tu instante viajera.

Comentarios

Entradas más populares de este blog

Veintisiete apuntes desordenados

Descabelladas suposiciones descubren un enigma

02262024 -96-